El Volkswagen Tipo 1, también llamado popularmente escarabajo, fusca, beetle, käfer, vocho, entre otras reconocidas denominaciones de acuerdo al país, es un vehículo que fue fabricado a lo largo de 65 años y quedó en la mejor historia de la industria automotriz mundial.
En la pasada edición del Salón del Automóvil de Shanghai la empresa china Great Wall realizó la presentación oficial del ORA Punk Cat, un modelo cien por ciento eléctrico y que tiene una innegable similitud con el histórico fusca.
El parecido con el emblemático modelo es indiscutible y, por lo tanto, llevó a que en un primer momento el Grupo Volkswagen anunciara que iba a realizar alguna demanda contra el gigante asiático.
Lo cierto es que el escarabajo chino, que finalmente ha sido denominado ORA Ballet Cat, ya ha entrado en plena fase de producción y se espera que las primeras unidades ya estén en el gigantesco mercado local en el primer trimestre del próximo año.
A diferencia del histórico modelo original, éste fusca tiene cuatro puertas, marcando de esa manera la principal diferencia en lo que se refiere a la carrocería.
Si bien por el momento no hay mayores datos, el motor podría llegar a erogar unos 170 HP y la autonomía sería de 400 kilómetros aproximadamente. Las medidas del auto son: 4.40 metros de largo, 1.86 de ancho y 1.63 de altura, contando con una distancia entre ejes de 2.75 metros.
También se supo que el ORA Ballet Cat tiene como base una plataforma eléctrica modular que puede ser utilizada en cinco segmentos, lo que la convierte en sumamente versátil.
Si bien Great Wall no ha informado oficialmente sus planes de venta para los mercados globales, se estima que bien podría estar llegando en un futuro no muy lejano al mercado europeo y también al brasileño. La compañía china ya patentó al modelo en el viejo continente y también en el vecino país.
Great Wall ya tiene una oficina montada en Alemania, que está ubicada en Munich y poco tiempo atrás fracasó la compra de la planta de producción que tiene Nissan en España, lo que demuestra su interés en el mercado europeo.
Por otra parte, en el mes de junio Great Wall concretó la compra de una de las fábricas de Mercedes-Benz en Brasil, concretamente la de San Pablo, con la finalidad de poner en marcha la fabricación de algunos de los modelos de las diferentes marcas que posee la compañía asiática. Tal vez éste sea el punto de partida para la producción del fusca eléctrico en el continente americano, con la posibilidad de hacerlo llegar a los países de la región.
