Nelson Vicente – Contacto: [email protected]
El XXIX Rally de Cataluña se disputó del 4 al 6 de noviembre de 1996. Una fecha que pasó a ubicarse en un lugar de honor para el automovilismo y también para todo el deporte uruguayo, porque Gustavo Trelles logró coronarse Campeón Mundial de Grupo N por primera vez, junto a su copiloto argentino Jorge “Bicho” Del Buono.
De esa manera se concretaban las máximas ilusiones del piloto minuano, que sumaba el título mundial a sus exitosos antecedentes de múltiple campeón nacional de rally y de pista y también de campeón sudamericano de rally, además de los títulos logrados en el rally español.
Esa temporada no empezó bien para Gustavo. En la primera fecha, disputada en Suecia, tuvo que abandonar en el tercer tramo de la segunda etapa por un fusible quemado, resignando toda posibilidad de sumar algún punto. En esa oportunidad el minuano utilizó un Subaru Impreza alquilado en Finlandia.
En Indonesia la buena fortuna tampoco lo iba a acompañar. Ya con un Mitsubishi Lancer Evo III sumó otro abandono por rotura de los amortiguadores.
La siguiente instancia fue el Rally de Grecia. Allí Gustavo logró llegar al final, ubicándose como escolta del alemán Uwe Nittel, que era el otro gran aspirante al título mundial con el equipo oficial Ralliart Germany, mientras que el uruguayo competía con un Lancer del equipo Race Rent.
En Argentina, con un auto que no estaba al 100% de su performance, el minuano volvió a ser escolta de Nittel, que le sacaba 13 puntos de ventaja en el certamen.
En Finlandia, Gustavo tuvo problemas con los neumáticos y terminó en cuarto lugar. Nittel fue tercero y la diferencia se estiró a 15 puntos.
En Australia todo parecía darse a favor del minuano, que iba liderando, hasta que se salió de la ruta y quedó encajado en el barro, perdiendo 20 minutos. Logró zafar para terminar sexto. Nittel ganó, pero fue excluido porque el motor de su auto estaba fuera de reglamento, por lo que en definitiva Trelles pudo descontar algunos puntos.
Separados por 11 puntos, Nittel y Trelles llegaron a San Remo. El uruguayo ganó de punta a punta, mientras que el alemán abandonaba al salirse de ruta en la primera etapa.
Y llegó la última fecha en Cataluña, con Gustavo liderando el campeonato por dos puntos. En la primera etapa, el minuano terminó en el primer lugar con cuatro segundos de ventaja, pero en la segunda jornada, graves problemas de frenos lo complicaron. Terminó el día como escolta de Nittel a un minuto cuatro segundos. La tercera etapa era al todo o nada. Gustavo salió como una tromba y comenzó a descontar rápidamente. El alemán sufría viendo como el uruguayo limaba la diferencia. Nittel no soportó la presión. Golpeó una piedra, perdiendo más de un minuto.
Así, a la uruguaya, en forma angustiante y sufriendo casi hasta el final, Gustavo Trelles ganó y logró coronarse, por primera vez, Campeón Mundial de Rally de Grupo N.
La promesa que no se cumplió…
En la década de los años noventa, Mitsubishi apostaba fuerte al mundial de rally como forma de promocionar sus autos, contando con un gran equipo oficial en el Grupo A.
En 1996, la empresa japonesa prometió que el piloto que ganara el mundial de Grupo N en la siguiente temporada iba a incorporarse al equipo oficial de Grupo A, junto al finlandés Tommi Makinen.
El uruguayo Gustavo Trelles salió campeón y el alemán Uwe Nittel fue su escolta.
Mitsubishi evaluó que en Uruguay vendía unos 400 autos al año, mientras que en Alemania, las ventas ascendían a más de 120.000 unidades anuales, por lo que Nittel pasó al equipo oficial de Grupo A, mientras que Gustavo continuó compitiendo en Grupo N, categoría en la que lograría coronarse campeón tres veces más.
Fotos: archivo El País.