A medida que se incrementa su desarrollo, crece el temor de que los autos del futuro puedan ser víctimas del fenómeno del “hackeado”.
No es nada nuevo ni novedoso. Es más, hace mucho tiempo que ya se ha instalado en la sociedad y muchos lo han sufrido de los más diversos modos.
Es la actividad de los “hackers”, quienes logran ingresar a un sistema informático pudiendo obtener informaciones y haciéndolo funcionar de un modo diferente al establecido originalmente.
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Esto tiene una directa relación con el futuro de la movilidad global, porque especialistas de todo el mundo ya han expresado, a través de diversos medios, los temores con respecto a la incidencia del “hackeo” en el funcionamiento de los automóviles del futuro, principalmente en relación al desarrollo de los sistemas de conducción autónoma mediante asistencia remota vía satélite.
Los “hackers” han logrado “perforar” las defensas de sistemas de gestión gubernamental, banca, finanzas, servicios militares, etc., por lo que no sería nada raro que también encaren un nuevo desafío con los vehículos autónomos.
Los especialistas en el tema, han expresado reiteradamente su preocupación, dando muestras fehacientes de lo que podría llegar a ocurrir si un “hacker” lograra tomar el control remoto de un automóvil y hacerlo dirigir hacia donde se le antoje.
Podrían llegar a generarse infinidad de situaciones que podrían culminar en un verdadero caos para el tránsito.
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En los períodos de pruebas ya se han dado situaciones en las que algunos servicios de apoyo satelital han presentado inconvenientes. Mediante la manipulación de las claves, se ha podido vulnerar los sistemas de conducción de los vehículos autónomos.
De parte de Google ya se ha informado que uno de los mayores problemas que se han presentado en el desarrollo de los vehículos autónomos, es la urgente necesidad de desarrollar sistemas operativos lo suficientemente blindados, seguros y confiables que sean a prueba de virus informáticos, “hackers” o asistencia remota inesperada o no deseada.