La categoría de los “fuscas” es una de las preferidas y más apreciadas por el público.
Buena cantidad de participantes (alrededor de 25 autos en cada fecha del año pasado), mucha paridad, maniobras de gran factura técnica y alguna “de las otras”, caracterizan a esta categoría en cada presentación.
Las dos series del sábado permitían vaticinar una gran lucha en la final del domingo. Pero nada fue así y todo se diluyó con el correr de los minutos de la competencia final.
La primera serie del sábado tenía al reaparecido Nicolás Corallo largando desde la primera posición, seguido por Marcel Bonnin, José Luis “Cocho”Pérez, Nicol Loduca, Ignacio Massat y Matías Saporiti.
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Al comienzo, un toque entre Bonnin y Corallo dejaba a Bonnin fuera de discusión.
Pérez aprovechaba para pasar a liderar, escoltado por Saporiti, mientra Corallo caía al tercer lugar.
Pero Corallo no bajó los brazos, recuperó posiciones, llegó al primer lugar y terminó ganando la serie, escoltado por Saporiti. Pérez fue tercero y Alejandro González cuarto.
La segunda serie tenía al campeón nacional 2015, Ignacio Abelenda, largando primero. Nicolás Alfonzo partía segundo, el reaparecido Pablo Paz largaba tercero, el debutante Martín Bermúdez salía desde el cuarto lugar, Fernando Braz da Luz largaba quinto y Raúl Braceras, sexto.
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Abelenda monopolizó el liderazgo de la carrera, dominando de principio a fin, quedándose con la victoria en forma incustionable. Fernando Castro, de gran labor, vino desde atrás para terminar segundo, seguido por Braceras, Bermúdez, Leonardo Álvarez y Bras da Luz.
La competencia final, pactada a 12 vueltas, prometía tener un desarrollo apasionante y muy atractivo.
Pero nada de eso sucedió, todo lo contrario. Hubo apenas algunos pasajes de carrera libre, porque las acciones tuvieron que detenerse dos veces con banderas roja por sendas incidencias y eso impidió no solo un trámite relativamente normal, sino que ni siquiera hubo una vuelta de carrera libre.
¿Qué pasó?
En la largada inicial, hubo un fuerte golpe de un competidor contra el muro de boxes, obligando a la detención de la carrera.
Luego de sacar el auto siniestrado, los autos de competencia se ubicaron en la grilla de partida para reiniciar la carrera.
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Al reiniciarse, todo fue normal hasta llegar a la “curva de la gota de agua”, donde varios autos se tocaron, hubo un coche volcado y tres autos involucrados seriamente, dañando incluso el guard rail del sector de salida de la curva.
Después de transitar durante cuatro vueltas con el auto de seguridad en pista, las autoridades de la competencia decidieron colocar bandera roja deteniendo todo, mientras se auxiliaba a los involucrados.
Todo no pasó de un susto, pero el tiempo que insumió la reparación del guard rail obligó a que al relanzarse la competencia desde la grilla de partida, solamente pudiera darse una vuelta y con el auto de seguridad en pista.
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Nicolás Corallo subió al escalón más alto del podio, Ignacio Abelenda al segundo escalón y Matías Saporiti completó el podio.
Así se cerró esta primera fecha de los Superescarabajos, en forma insólita y totalmente inesperada.
