En la segunda mitad de la década del 70, Daimler – Benz, desarrolló el novedoso sistema de airbag. Tras muchas pruebas y exhaustivos experimentos, el 23 de octubre de 1981, lograron patentar este asombroso invento. El primer modelo en usarlo fue el Mercedes-Benz Clase S W126 de 1981, aunque para esa fecha el nombre y la idea “airbag” no eran muy convincentes.
Con el paso del tiempo y el avance de la tecnología, este sistema de seguridad logró minimizar las fracturas de tórax y nariz causadas por el impacto contra el volante de sus choferes. El sistema de Airbag, está compuesto por detectores de impacto que están colocados y esparcidos estratégicamente en el vehículo.
El Airbag es una bolsa de nylon inflada, normalmente, con nitrógeno. Junto a una reacción química que se produce en un tiempo muy reducido, logra desprender una gran cantidad de gas de un modo explosivo, siendo capaz de inflarse en menos de 30 milisegundos. Su activación está controlada por un sistema electrónico que distingue entre un choque leve, mediano o grande que pueda poner en peligro a los ocupantes.
Un micro sensor mide la des aceleración y envía los datos a la computadora para su análisis. Ante una fuerte colisión, la central manda un impulso eléctrico que inflama una pequeña cantidad de pólvora negra situada por debajo de la bolsa; haciendo contacto con el contenedor de generación de gas. Es entonces que unas pastillas de Azida de sodio (NaN3) desprenden en la detonación los 30 litros de nitrógeno que inflarán ese airbag. En la también se libera “Talco” para que todo este sistema funcione correctamente y cumpla su propósito.
Al día de hoy existe una gran variedad:
Airbag frontal: fue el primero en fabricarse y desarrollarse, además es también el más común. Se utiliza para el conductor y también para el acompañante. Se acciona en caso de choque frontal a partir de cierta velocidad. En el caso del conductor cubre el volante y en el del acompañante lo protege de los fuertes impactos contra el tablero.
Airbag lateral: Por lo general se coloca en el lateral del propio asiento y es accionado en caso de impacto lateral entre la puerta y el cuerpo de la persona. El airbag lateral puede proteger, según su tamaño, solo el tórax o el tórax y cabeza si el auto no cuenta con airbag de cortina.
Airbag de cortina: es el que se despliega desde el arco del techo descolgándose como una cortina. Protege la cabeza de impactos contra la ventanilla.
Airbag posterior: se trata de una cortina que se despliega detrás de los apoyacabezas de los asientos traseros en caso de que el auto sufra un impacto fuerte por detrás.
Airbag de rodilla: pensado para que el conductor no se golpee las rodillas con el tablero.
Airbag central: Menos habitual. Se sitúa entre los asientos para evitar que en los pasajeros se golpeen en caso de accidente.
Airbag de peatón: pensado para reducir los daños al peatón en caso de alcance. Sobre todo en la cabeza.
Airbag de cinturón de seguridad: viene incorporado en el cinturón de seguridad y se despliega para aminorar la
presión que ejerce el cinturón sobre el pecho.
Airbag in Roof: Recientemente el Citröen C4 Cactus (Ver Test Drive) implementa este sistema con el fin de lograr más espacio en el tablero y optimizar recursos, logrando una protección óptima.
