Nelson Vicente – Contacto: [email protected]
Cuando David Castera, director del Rally Dakar, comentó en el lanzamiento de la competencia que esta edición iba a ser más una carrera de supervivencia que de velocidad pura, sabía muy bien por qué lo estaba diciendo y lo tenía bien claro, tratando de concientizar a los competidores de las altas exigencias y dificultades que iban a tener que afrontar a lo largo de las 12 etapas en Arabia Saudita.
Y, apenas disputada la primera etapa el sábado, este domingo los competidores ya tuvieron que encarar una de las mayores exigencias de todo el rally, la temida etapa 48 Horas, denominada de esa manera porque, luego de tener que pernoctar esta noche en pleno desierto, en campamentos previstos por la organización, al estilo de los clásicos del recordado París – Dakar, todos los participantes deberán encarar el segundo día de la etapa sin haber recibido asistencia externa, reparando sus vehículos y tratando de alistarlos de la mejor manera posible con los elementos que llevaban a bordo.
Además, hay que tener en cuenta que el reglamento indicaba que hoy, a la hora 17:00 de Arabia Saudita, sonó una alarma en cada vehículo, avisando que tenía que tenía que dirigirse, directa y obligatoriamente, al campamento más cercano, de los seis que dispuso la organización en el desierto, llamados “break zones”, los que están repartidos en la reserva natural de Majami al’Hadb, por lo que, buena parte de los participantes, ni siquiera pueden compartir campamento con sus compañeros de equipo.
Así es el desarrollo de esta especial etapa 48 Horas, la que, seguramente, va a tener importantes consecuencias para las futuras jornadas, tomando, como ejemplo, lo acontecido con Carlos Sainz (Ford), que sufrió un rudo vuelco, siendo rescatado por su compañero de equipo, Mitch Guthrie, perdiendo más de una hora en la incidencia, lo que estaría disminuyendo sus posibilidades de obtener su quinta victoria.
Otro que estuvo complicado fue Sébastien Loeb, con serios problemas mecánicos en su Dacia, que lo llevaron a perder más de 30 minutos, alejándolo de la vanguardia del rally.
Lo cierto es que hoy, el más rápido fue Yazeed Al Rajhi (Toyota), que terminó la jornada con una ventaja de 1’19” sobre Nasser Al-Attiyah (Dacia), mientras que Mattias Ekström (Ford), quedó tercero, a más de ocho minutos de Al Rajhi.
Lo acontecido en esta jornada puede ser un preludio de lo que pasará en los próximos días en la categoría de los autos, en la que hoy fueron seis los pilotos que se turnaron en el liderazgo virtual de la etapa (que culminará mañana), hasta que Al Rajhi quedó primero.
Por su parte, en las motos, el ganador del prólogo y de la etapa inaugural, Daniel Sanders (KTM) volvió a demostrar que está en gran forma, marcando el mejor tiempo este domingo, escoltado por Ricky Brabec (Honda), con Ross Branch (Hero) ocupando la tercera posición.
Los uruguayos Álvaro Cóppola y Fabián von Thuengen siguen en carrera.
Pasando a la categoría de los camiones, dos grandes protagonistas de anteriores ediciones, Martin Macik (MM Powerstar) y Ales Loprais (Iveco), se perfilan para ser grandes protagonistas, por más que todavía quedan miles de kilómetros por recorrer.
Fotos: A.S.O. Dakar.com