El Campeonato Mundial de Fórmula Uno ha tenido a lo largo de sus siete décadas de existencia, varias generaciones de pilotos pertenecientes a una misma familia, pero solamente dos familias pueden jactarse de haber obtenido el título por parte de un padre y de su hijo. El primer caso fue el de Graham Hill, que se coronó en 1962 con BRM y en 1968 con Lotus. Su hijo, Damon, se consagró campeón en 1996 con Williams.
El otro caso es el de los Rosberg. Keke ganó el título en 1982 con Williams, mientras que su hijo obtuvo el campeonato de 2016 con Mercedes.
A diferencia de lo acontecido con la familia Hill, Keke pudo seguir de cerca la trayectoria de su hijo, incluida su coronación como campeón mundial en 2016, mientras que Graham Hill ni siquiera pudo llegar a ver competir a su hijo Damon, porque falleció en un accidente de aviación en 1975.
Keijo Erik Rosberg, obviamente más conocido como Keke Rosberg, nació en Estocolmo, Suecia en 1948, pero al haber competido con licencia de Finlandia, quedó en la historia como el primer piloto finlandés que se consagró campeón mundial de Fórmula Uno, inaugurando una exitosa dinastía, que, décadas después fue exitosamente seguida por su hijo Nico.
Keke debutó en la Fórmula Uno en 1978 con el desaparecido equipo Theodore, pasando luego por otras escuderías que tampoco están más en la categoría, como ATS, Wolf y Fittipaldi, hasta llegar en 1982 a Williams, equipo con el que ese año obtuvo su primera victoria en el mundial y con el que se consagró campeón del mundo en esa misma temporada. Su único triunfo de ese año fue en el Gran Premio de Suiza, que se disputó en el autódromo francés de Dijon Prenois, porque en Suiza estaban prohibidas las carreras de autos. Hoy puede parecer insólito que un piloto se corone ganando una sola carrera, pero en aquella época reinaba una envidiable paridad en la Fórmula Uno y prueba de ello es que en 1982, en 16 grandes premios hubo 10 ganadores diferentes.
Keke sumó además otras cuatro victorias y subió al podio en 17 grandes premios, logrando seis pole positions y tres récords de vuelta. Se retiró en 1985, el año en el que nació Nico Erik, quien iba a coronarse en 2016.
Nico llegó a la Fórmula Uno en 2006, debutando en el equipo Williams, la misma escudería con la que su padre se había consagrado campeón del mundo.
En 2010 pasó al equipo Mercedes, que regresaba a la Fórmula Uno luego de una larga ausencia. Ese año marcó el retorno de Michael Schumacher a la categoría, sumándose a la escuadra germana, en un hecho histórico: Mercedes volvía a competir oficialmente con dos pilotos alemanes.
Pero recién en el Gran Premio de China de 2012 las flechas plateadas lograron su primera victoria, por intermedio de Nico, quien obtenía el primero de los 23 triunfos que consiguió en la máxima categoría. El piloto alemán fue vice campeón mundial en 2014 y 2015, coronándose campeón en 2016, luego de una áspera y durísima lucha con Hamilton.
Nico Rosberg ganó el campeonato del mundo de 2016, luego de una áspera, durísima e inolvidable lucha con su coequipier Lewis Hamilton.
Nico comenzó el año en forma apabullante, con cuatro victorias consecutivas. Pero en España, Hamilton chocó en la primera vuelta a Rosberg y ambos abandonaron. Luego el inglés ganó seis de las siguientes siete fechas, poniendo el mundial al rojo vivo. Rosberg había ganado en Bakú y luego logró tres triunfos más, sumando un tercer puesto en Malasia, donde Hamilton abandonó.
Rosberg triunfó en Japón, (su último éxito del año), mientras Hamilton ganaba los últimos cuatro grandes premios, con Rosberg como escolta, incluido un polémico final en la fecha de clausura de la temporada, en Abu Dabi, donde el inglés hizo todo lo que pudo para intentar que Sebastian Vettel (Ferrari) que venía tercero, pudiera superar a Rosberg, lo que le hubiera dado el título a Hamilton.
Pero Rosberg finalmente pudo terminar segundo y se consagró campeón mundial, escoltado por Hamilton a cinco puntos.
Seis días después de haberse consagrado campeón, sorpresivamente Nico anunció que se alejaba de la Fórmula Uno. Nunca antes un campeón mundial había abandonado así el campeonato del mundo.
“Correr requiere una enorme intensidad y tuve que luchar con una fuerza increíble. Estuvo muy bien en su momento y cumplí mi objetivo, ganar el Mundial”, comentó tranquilo.
La fecha del 18 de mayo de 2018 seguramente ocupa un sitio muy especial en el recuerdo de la familia Rosberg. Ese día, posteriormente a la primera tanda de entrenamientos para el Gran Premio de Mónaco, Keke y Nico recorrieron durante dos vueltas el famoso circuito del Principado. Keke lo hizo a bordo del Williams FW08 y Nico con el Mercedes F1 W07. Mónaco es otro hecho histórico para la familia, porque Keke y Nico son el único binomio padre e hijo, que, además de haber sido campeones del mundo, han ganado el emblemático gran premio. Keke triunfó en 1983, con Williams y Nico logró tres victorias consecutivas, con Mercedes, en los años 2013, 2014 y 2015.