Nota y Fotos: Luis César Piedra Cueva – Autoanuario
El segmento de los Deportivos Utilitarios (o SUV si es en inglés) crece a paso firme en la mayoría de los mercados de nuestra región. Se trata de vehículos polifuncionales, en muchos casos con atributos off road, altos, de buen tamaño y espaciosos, que además de generar una gran sensación de seguridad, brindan un confort de marcha que nada tienen que envidiar a cualquier buen sedán del mercado.
En agosto de este año, General Motors Uruguay ingresó al país su nueva Chevrolet Tracker, respuesta inequívoca de la marca a la demanda de sus clientes para los medianos de este segmento.
Es una respuesta fuerte, y por ello las consecuencias no tardaron en manifestarse, con una importante demanda inmediata y en constante crecimiento.
Entre los principales argumentos que justifican dicho éxito, comenzaremos por referirnos al aspecto exterior, en el que evidentemente el centro de diseño de GM Corea hizo gala de su notable capacidad. A partir de un manejo adecuado y con una correcta distribución de líneas y volúmenes, desarrollaron un vehículo sorprendente que además de ser atractivo, parece más grande de lo que indican sus dimensiones reales.
Línea de cintura alta, pasaruedas abultados, rodado de 18”, grandes faros trapezoidales y la parrilla utilizada en los demás nuevos modelos Chevrolet, son algunos de los componentes que constituyen esta pequeña fortaleza rodante.
Visto de atrás, tiene gran protagonismo el estilizado conjunto óptico ubicado por debajo de la luneta trasera. De paso, vale mencionar la buena altura del piso del maletero, típica del segmento, que facilita enormemente la tarea de carga y descarga de equipajes.
Las puertas, manteniendo el criterio de amplitud propuesto en la nueva Tracker, son generosas y facilitan en gran medida el pasaje de las personas en ambos sentidos.
Y como era de esperar, ocurre lo mismo con el interior del habitáculo. Aquí se destaca el espacio abundante en las dos plazas, la modernidad del panel frontal y cuadro de instrumentos, los elegantes tapizados en cuero bitonal de los asientos, el volante multifunción y el techo eléctrico de cristal.
Surge entonces otro de los aspectos diferenciales de la Tracker, componente muy importante para la marca. Se trata del exclusivo sistema My Link, un nuevo dispositivo que mediante pantalla color táctil de 7”, administra las funciones de audio, video y conectividad del vehículo.
Finalmente, el aspecto mecánico. Debajo del capó Chevrolet colocó su remozado motor 1.8 con 16 válvulas, capaz de ofrecer 140 cv de potencia que en esta versión testeada, se acopla a la caja automática secuencial de 6 velocidades.
Por todo lo visto hasta aquí cabría suponer que una vez en marcha la Chevrolet Tracker sería capaz de mostrar un comportamiento acorde a tal despliegue.
Y supusimos bien.
Por un lado, la buena calidad del armado, los materiales utilizados y la arquitectura estructural, constituyen un ambiente impecablemente insonorizado, fundamental para el bienestar a bordo, en el que se luce el sistema de sonido bien distribuido a través de sus 6 parlantes.
Por otra parte, la dirección suave y eficiente mantiene una agradable complicidad con la caja de cambios automática que transita sin sobresaltos entre marchas, y responde con inmediatez a cualquier demanda del acelerador.
Siempre reacciona con soltura, tanto sea a la salida de un semáforo si se desea “picar” un poco por delante de los demás autos, o en ruta, cuando se trata de adelantar a otro vehículo sin sentir que el estómago se estremece. Pero aún en régimen bajo, el motor manifiesta una buena elasticidad que le permite recuperar bien sin necesidad de buscar el cambio anterior.
Como no podía ser de otro modo, las dimensiones, el peso y la pisada del rodado hacen de la estabilidad y el confort de marcha otro aspecto destacable de la nueva Tracker. Que también depende del sistema de suspensión, perfectamente calibrado ya sea para transitar por caminos deteriorados o para deslizarse suavemente por buenas autopistas a velocidades altas sin alterar la comodidad de sus pasajeros. A la hora de viajar el motor se mantiene dentro de un régimen sereno, favoreciendo la sensación de confort y seguridad que además se multiplica gracias a la atenta vigilancia de los controles electrónicos de tracción y estabilidad.
Chevrolet sale al mercado con un producto notable, estéticamente muy atractivo, con un equipamiento completísimo, mecánica robusta, gran amplitud de espacio, desbordante de confort y seguridad y a un precio sumamente competitivo.
La Tracker de lejos parece grande. Y de cerca, es.
Precio:
Chevrolet Tracker 1.8 Versión LTZ FWD Manual
U$S 34.990
Chevrolet Tracker 1.8 Versión LTZ+ AWD Automática
U$S 39.990
Garantía:
3 años o 100.000 km en ambos casos.