El 5 de enero de 2020 se abrirá una nueva era para el Rally Dakar, la competencia más dura y exigente del mundo, cuando en Jeddah se largue su próxima edición, la que tendrá su desarrollo íntegramente en Arabia Saudita.
Será un desafío diferente, absolutamente disímil con respecto a lo que había acontecido en los últimos años, cuando el Dakar se había disputado en diversos países de América del Sur.
El equipo MINI X-Raid se está preparando duramente para intentar volver a lograr la victoria en la dura competencia.
La escuadra alemana dirigida por Sven Quandt, ha realizado importantes modificaciones en el MINI John Cooper Works Buggy de tracción simple, con varias evoluciones que pretenden tener un auto potente, veloz, confiable y que sea capaz de poder desarrollar toda su performance en las temibles e interminables dunas árabes.
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Para la próxima edición del Dakar, el equipo presentará solamente dos autos oficiales.
Uno estará conducido por el exitoso Stéphane Peterhansel, quien suma 13 victorias en el Dakar. Por primera vez, el francés tendrá como copiloto a su esposa Andrea, quien ha tenido varias participaciones en el Dakar en la categoría motos. No es ningún experimento ni tampoco un invento marketinero. El matrimonio Peterhansel ha logrado la victoria este año en el Abu Dhabi Desert Challenge, demostrando así su capacidad y buenas condiciones.
El otro MINI estará tripulado por los españoles Carlos Sainz y Lucas Cruz, también de vasta experiencia en el Dakar. El piloto madrileño ya tiene dos victorias en esta competencia.
El Mini John Cooper Works Buggy ha sido objeto de varias modificaciones, entre las que se destaca la nueva parte delantera, que ha sido acortada 15 centímetros con respecto a la versión anterior, mientras que también tiene una menor distancia entre ejes, cambios estructurales estos que buscan lograr una mejor performance en las dunas. Además, tiene una nueva evolución del motor, que permitirá disponer de mayor potencia y una respuesta más rápida, a lo que se le suman nuevos desarrollos en el sistema de suspensión y también se ha alivianado en su peso total.
Los dos autos tendrán su prueba de fuego a partir de este sábado 5 de octubre, cuando comience a disputarse el Rally de Marruecos, que será la última fecha de la temporada de la Copa Mundial FIA de Rally Cross-Country.