El Presidente de Mercedes-Benz de Brasil, Philip Schiemer, anunció en San Pablo el programa de inversiones de la compañía para los próximos cinco años, comprendiendo el período 2018/2022.
Mediante un comunicado, la marca germana informó que realizará una inversión de 750 millones de dólares en el vecino país, la cual estará destinada a la ampliación y reformas de las dos fábricas de camiones y autobuses ubicadas en Sao Bernardo do Campo, San Pablo, y en Juiz de Fora, en el interior del estado de Minas Gerais.
Estas nuevas inversiones se suman a las realizadas en el período 2015/2018, las cuales ascendieron a la cifra de 230 millones de dólares.
Según Schiemer, el aumento de las inversiones refleja la mejora de los indicadores económicos del país norteño, después de más de dos años de una profunda recesión económica.
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“Hace un año hubo un cambio significativo en la política económica, la caída de la inflación y los intereses muestran que los fundamentos económicos están en el camino correcto”, aseveró Schiemer.
Asimismo, explicó que además de invertir en la modernización de fábricas y línea de productos, la empresa también se prepara para futuros cambios en las normas de emisiones de contaminantes y en la necesidad de aumentar la conectividad de los vehículos.
A partir del año 2013 el mercado brasileño de camiones sufrió una severa caída en las ventas, pero en la actualidad la situación ha cambiado favorablemente, con un notorio incremento en la comercialización, principalmente, de camiones extra pesados, que son los más utilizados en el ámbito de la producción agropecuaria.
De acuerdo a lo informado por medios especializados brasileños, en lo que va del presente año, el aumento de las ventas de camiones ha sido notorio, con un incremento del 70%, lo que señala que se está saliendo paulatinamente del período de mayor crisis.
