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Inesperada o no, lo cierto es que la victoria lograda por Lando Norris en el Gran Premio de Miami sirvió para afianzar al piloto británico en el destacado lote de grandes protagonistas de la presente temporada, integrándolo, además, a la selecta nómina de ganadores de un gran premio de Fórmula Uno, halago que miles de pilotos han querido lograr y solamente algunas decenas lo han conseguido.
Norris, nacido en Bristol, el 13 de noviembre de 1999, debutó en la Fórmula Uno en el año 2019, cuando contaba con 19 años y 124 días y tuvo que esperar más de un centenar de grandes premios para lograr su primera victoria, la que obtuvo en su presentación número 110.
El inglés llegó precedido de valiosos antecedentes en el karting, entre los que se destacaba la obtención del título en el Campeonato de Europa CIK-FIA de 2013 y en el Campeonato del Mundo CIK-FIA de 2014.
En 2015 ganó el certamen MSA Formula (ex Fórmula Ford británica) y al año siguiente se coronó en la Toyota Racing Series y ganó los campeonatos NEC y Eurocopa de Fórmula Renault 2.0.
En el año 2017 obtuvo el título de la Fórmula 3 Europea, ganando seis de las nueve competencias.
En la siguiente temporada se integró al certamen de F2, ubicándose como escolta del campeón, George Russell.
A partir de 2018 pasó a integrar el programa de jóvenes pilotos de McLaren, equipo con el que debutó en la Fórmula Uno en el Gran Premio de Australia de 2019.
En Fórmula Uno, el británico disputó 110 grandes premios, con una victoria. Largó una carrera desde el primer lugar de la grilla, subió 16 veces al podio y obtuvo un récord de vuelta.
El pasado domingo, a sus 24 años, consiguió su primer gran objetivo, ganar un gran premio de Fórmula Uno, haciendo sonar, por primera vez en la historia del máximo certamen, el “God Save the King”.
