Nelson Vicente – Contacto: [email protected]
Uno de los temas más comentados de las últimas semanas en relación a la Fórmula Uno, y de los más urticantes por cierto, es la solicitud que le ha enviado Felipe Massa a la Federación Internacional del Automóvil (FIA), reclamando el título del campeonato del mundo de 2008, el que en la pista se adjudicó Lewis Hamilton con McLaren en una de las más dramáticas definiciones que ha tenido la máxima categoría a lo largo de su espectacular historial, al definirse el certamen por un solo punto (98 a 97) en favor del británico.
El origen de la demanda planteada por Massa, que era piloto de la Scuderia Ferrari, se basa en las declaraciones efectuadas en su película biográfica por Bernie Ecclestone quien en aquella época era el patrón de la Fórmula Uno. En el documental llamado Lucky!, que se estrenó este año, el británico declaró que tanto él, como quien en aquel momento era el presidente de la FIA, Max Mosley, conocían la manipulación realizada por el equipo Renault para que su piloto Fernando Alonso ganara del Gran Premio de Singapur.
Según Massa, ese fue el gran motivo que impidió su coronación como campeón del mundo, porque en esa recordada carrera él no pudo sumar puntos, mientras que Hamilton terminó tercero, cosechando seis unidades, las que al final de la temporada le valieron la conquista del título.
Por eso Massa pide que se anule esa primera edición del Gran Premio de Singapur. Si esto llegara a suceder, entonces el brasileño pasaría a ser el piloto con mayor cantidad de puntos de ese campeonato…
El desarrollo de la temporada 2008 tuvo a Hamilton y a Massa como los grandes protagonistas. El inglés obtuvo cinco triunfos, mientras que el brasileño consiguió seis victorias.
A la última fecha, el Gran Premio de Brasil, llegaron separados por siete puntos en favor de Hamilton. Si Massa ganaba en su tierra, el británico tendría que terminar en quinto lugar para ser campeón.
Felipinho lideró 64 de las 71 vueltas y cuando “prestó” el liderazgo fue por haber pasado por su box.
Pocos minutos antes de la largada se desató un impresionante aguacero, que obligó a atrasar el inicio del gran premio.
La carrera comenzó a desarrollarse con piso mojado y desde el comienzo se produjeron incidencias que provocaron abandonos.
Al llegar a los giros finales la lluvia volvió a arreciar y los pilotos cambiaron neumáticos nuevamente, excepto los dos de Toyota, Timo Glock y Jarno Trulli, que aparecieron en los primeros lugares.
En la vuelta final, Massa lideraba y Hamilton estaba sexto. Todo se estaba dando para la coronación del paulista como campeón del mundo.
Y el brasileño ganó, desatando el festejo de la Scuderia Ferrari y la euforia de los miles de aficionados, la mayoría de los cuales no percibieron que en la última curva Glock perdió levemente el dominio de su auto, siendo superado por Hamilton.
Así, el inglés consiguió el quinto puesto final, que le reportó la conquista de su primer título mundial, convirtiéndose en el campeón mundial más joven de la historia de la Fórmula Uno con 23 años, 9 meses y 26 días, dejando atrás el récord que estaba en poder de Fernando Alonso, que cuando se coronó campeón por primera vez en 2005 tenía 24 años, 1 mes y 27 días.
Mi recuerdo del gran premio paulista
Felipe Massa ganó el Gran Premio de Brasil 2008 y en la sala de prensa del Autódromo de Interlagos se desató un verdadero carnaval.
El paulista se coronaba campeón del mundo.
Recuerdo perfectamente a los colegas brasileños saltando, festejando, gritando y golpeando las mesas en su celebración.
Yo seguí mirando los monitores y vi que el auto de Glock se abría demasiado en la última curva, en el ingreso a la recta principal, debido a que el piso estaba muy mojado y su Toyota tenía poca adherencia, porque seguía calzado con neumáticos para piso seco.
Así Hamilton capturó la quinta posición que le valió la conquista del certamen.
El inglés cruzó la meta a 39 segundos de Massa.
Ese fue el tiempo en el que el paulista fue fugazmente dueño de la corona mundial, la que, finalmente, quedó en poder del inglés.
La victoria lograda en el Gran Premio de Brasil de 2008 fue el último éxito del piloto brasileño en la Fórmula Uno.
Y la obtención del certamen de constructores de 2008 por parte de la Scuderia Ferrari fue la última conquista del equipo de Maranello hasta el momento.
El recordado crashgate de Singapur
El Gran Premio de Singapur de 2008 quedó en la historia por varias razones, entre ellas, las dos principales, porque fue la primera carrera disputada en horario nocturno y también por haber sido escenario del famoso crashgate del equipo Renault.
Felipe Massa lideraba, mientras que Fernando Alonso estaba bastante atrás. En la vuelta 12 el español paró a cambiar neumáticos y cinco giros más tarde, Nelsinho Piquet, su compañero de Renault, estrellaba su auto contra el muro, provocando la neutralización de la carrera. Con el auto de seguridad en pista no se podía ingresar a boxes, por lo que todos esperaron que se reanudara la carrera.
Cuando todos fueron a boxes, Alonso quedó primero y terminó ganando. Kimi Raikkonen (Ferrari) fue su escolta y Hamilton completó el podio.
Massa tuvo un día nefasto. Al ir a boxes, para cambiar las gomas y para el repostaje de combustible, salió antes de que terminaran de cargarle nafta y arrancó con la manguera colgando de su Ferrari.
Los mecánicos tuvieron que correr hasta el final de la calles de boxes para desengancharla, provocando una gran pérdida de tiempo para el piloto, que terminó en el puesto 13 sin poder sumar puntos.
En 2009, en revancha por haber sido despedido de Renault, Piquet Jr. declaró que la maniobra de su choque, para favorecer el triunfo de Alonso, había sido por orden de los responsables del equipo, Flavio Briatore y Pat Symonds, quienes fueron expulsados de la Fórmula Uno.
Por eso es que Massa pide la anulación de la carrera para poder ser campeón.