Luego de haber realizado un estudio preliminar sobre los daños sufridos por el auto de Max Verstappen luego del impacto contra las gomas de protección de la curva Copse del circuito de Silverstone, tras haber sido golpeado por el Mercedes de Lewis Hamilton, el equipo Red Bull ha informado que los daños podrían ascender a unos 750.000 euros, aproximadamente, aunque todavía no se ha podido hacer un estimativo más exacto.
Y es que todo depende, además, en poder saber si la unidad de potencia proporcionada por Honda también ha resultado dañada en la incidencia. Para poder tener una noción más exacta, el equipo austríaco envió la unidad de potencia directamente a la planta de Honda en Japón, ubicada en la localidad de Sakura, donde será analizada para poder saber cabalmente si algunos elementos han sido afectados y deben ser cambiados o, si, por el contrario, la unidad de potencia puede salvarse, volviendo a ser utilizada. En referencia a este tema, Toyoharu Tanabe comentó que piensa que la unidad de potencia puede llegar a salvarse, agregando que cuando vio por primera vez los daños del auto de Verstappen, pensó que los daños eran muy importantes, pero luego agregó que parecería que las roturas fueran más chicas de lo que se veía a primera vista.
Pero además, por reglamento, cada piloto tiene un número determinado de componentes de la unidad de potencia que pueden cambiarse o sustituirse durante la temporada, sin llegar a ser penalizado.
Por eso, en el caso de que alguno de los seis elementos que integran la unidad de potencia deban ser cambiados obligadamente ahora, esto puede poner en riesgo para el futuro a Verstappen, porque en caso de superar la cantidad autorizada de sustituciones, puede ser pasible de penalizaciones en la grilla de largada de un gran premio.
Por parte del equipo Red Bull, su asesor Helmut Marko señaló que el auto quedó inutilizado, por lo que es una pérdida total para la escudería, agregando que este es un problema muy grave para el resto de la temporada, debiendo tenerse en cuenta que a partir de este año hay que tener en cuenta un elemento que anteriormente no preocupaba a los equipos más poderosos de la Fórmula Uno: la nueva reglas financieras impuestas por la Federación Internacional del Automóvil (FIA) han impuesto un tope de gastos para el desarrollo, fabricación y funcionamiento de los autos, el que actualmente está en 145 millones de dólares anuales.
De ahí, que una rotura como la sufrida por el auto de Verstappen pueda complicar los planes originales del equipo, porque desde esta temporada todos están abocados a fabricar la mínima cantidad de componentes posibles, porque no quieren llegar al final del campeonato con un excesivo sobrante de elementos, la mayoría de los cuales no serán utilizados en el próximo campeonato.
Y otra incógnita queda planteada para el futuro: ¿sabiendo la dureza del impacto que sufrió el auto, (51G), Red Bull y Honda se arriesgarán a utilizar algunos de los elementos, que en principio pueden parecer estar en buen estado, pero que conociendo las exigencias de un fin de semana de gran premio puedan llegar a dañarse complicando la gestión del piloto?
Foto: @Max33Verstappen
