Cuando promediaba el mes de junio, noticias provenientes desde Gran Bretaña indicaban que la situación del equipo McLaren de Fórmula Uno se estaba tornando prácticamente insostenible, debido a los serios problemas económicos que estaba afrontando la escudería con sede en Woking.
Las informaciones indicaban que los responsables del legendario equipo habían puesto a la venta entre un 20 y un 30% del paquete accionario, con la finalidad de obtener fondos frescos para poder encarar la futura actividad de la Fórmula Uno.
Cuando ya se estaba iniciando el Campeonato Mundial de Fórmula Uno, la solución llegó de parte del Banco Nacional de Bahréin (NBB), que le otorgó un préstamo de 150 millones de libras, unos 163 millones de euros aproximadamente, con lo que los responsables del equipo esperan poder paliar las consecuencias del descalabro económico en el que se ha visto sumergida la escudería en los últimos años, a lo que se le sumaron también importantes problemas ocasionados por la pandemia de coronavirus.
En un comunicado oficial emitido por el propio banco, se informó que se había aprobado una línea de financiación por la mencionada cantidad.
Este préstamo tiene aspectos muy especiales, porque hay que tener en cuenta que el 44% de las acciones del banco pertenecen a Bahrain Mumtalakat Holding Company, el fondo soberano del Reino de Bahréin, que a su vez es propietario del 56% del paquete accionario de McLaren Group.
Gracias a la obtención de este préstamo, el Grupo McLaren podrá seguir funcionando, tanto en lo referido a su equipo de Fórmula Uno, como al sector destinado a la fabricación de automóviles. La falta de liquidez era el mayor problema que tenía McLaren y el préstamo del banco de Bahréin permite solucionar, al menos por el momento, la acuciante situación que estaba viviendo, que incluso había llevado a proponer una drástica reducción de la plantilla de trabajadores, estimándose que serían 1.200 los despidos a producirse en total en las tres divisiones: Racing, Automotive y Technologies.
En principio se había informado que para poder seguir funcionando normalmente, McLaren había salido a buscar un préstamo de unos 280 millones de libras esterlinas.
El paquete accionario de McLaren Group está bastante fragmentado, porque, tal como lo expresábamos anteriormente, el 56% le pertenece a Bahrain Mumtalakat Holding Company. Mansour Ojjeh, un empresario francés nacido en Arabia Saudita, posee un 14% de las acciones y, desde el año 2018, un 10% está en poder del empresario canadiense Michael Latifi, quien en el pasado mes de abril había adquirido también el 10% del empobrecido equipo Williams, la escudería en la que compite su hijo Nicholas en la Fórmula Uno. El restante 20% de las acciones está en poder de pequeños accionistas.
Sin dudas que la buena gestión desarrollada el pasado domingo por los dos pilotos de McLaren en el Gran Premio de Austria, deben haber caído muy bien en el seno del equipo y, también, en el McLaren Group en general.
