Con un desarrollo muy atractivo, se disputó el Gran Premio de Brasil en el autódromo de Interlagos, competencia que puede haber marcado la despedida del circuito paulista de la Fórmula Uno, porque todo indica que el año que viene el gran premio se disputará en Río de Janeiro, en un circuito que se está construyendo.
Para Max Verstappen (Red Bull), sin dudas que este triunfo debe ser de los que más va a recordar en su vida, porque tuvo una impresionante lucha con Lewis Hamilton (Mercedes), quien llegó a San Pablo dispuesto a estrenar de la mejor manera su sexto título mundial conseguido en la fecha anterior. Verstappen largó desde el primer lugar de la grilla, escoltado por Sebastian Vettel (Ferrari), con Hamilton en el tercer lugar.
El holandés largó muy bien, apoderándose del liderazgo, mientras Hamilton superaba a Vettel. El inglés superaba al holandés al momento del cambio de neumáticos, pero Verstappen se rehizo rápidamente, recuperando el liderazgo, aunque Hamilton volvió al primer lugar, entablándose una muy interesante lucha entre ambos. Verstappen logró distanciarse de Hamilton y pasó a consolidarse en el liderazgo. Sebastian Vettel estaba tercero, Valtteri Bottas (Mercedes) iba cuarto, Alexander Albon (Red Bull) ocupaba el quinto lugar y Charles Leclerc (Ferrari) se encontraba sexto, luego de haber largado desde el puesto 14 por penalización de diez lugares al haber cambiado el motor.
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Bottas abandonaba por rotura de motor y debía neutralizarse la carrera para retirar al auto. Aprovechando la neutralización, Verstappen cambió neumáticos, por lo que Hamilton volvió a liderar, pero cuando se reinició la carrera, el holandés superó al campeón, apoderándose definitivamente del liderazgo. Los dos pilotos de Ferrari mantenían una dura lucha entre ambos y se presagiaba un duro final, el cual aconteció pocas vueltas después, cuando se tocaron, quedando fuera de carrera los dos autos, en otra maniobra inconcebible, pero esperada por la enorme e incontenible rivalidad que se está generando entre ambos.
Sobre el final, Hamilton había cambiado neumáticos y al regresar a la pista trató de recuperar posiciones, luchando con Alexander Albon (Red Bull) que ocupaba el segundo lugar, produciéndose un toque entre ambos. De esa manera se benefició Pierre Gasly (Toro Rosso), que pasó a ubicarse como escolta, quedando Hamilton tercero, seguido por Carlos Sainz Jr. (McLaren).
Sin problemas, Verstappen iba a obtener su tercer triunfo del año, escoltado sorprendentemente por Gasly. Hamilton terminaba tercero, pero fue penalizado por el toque a Albon, cayendo al séptimo lugar, mientras Sainz Jr. subía a la tercera posición, logrando su primer podio en la Fórmula Uno luego de haber largado último por problemas mecánicos en la clasificación. En el cuarto lugar quedó Kimi Raikkonen, seguido por su compañero del equipo Alfa Romeo Antonio Giovinazzi, en el mejor resultado de la escudería italiana. El sexto puesto fue para Daniel Ricciardo con el Renault.