La reciente realización del Salón del Automóvil de Ginebra dejó mucho material para el análisis, principalmente, con la confirmación de la creciente tendencia hacia la hibridación y electrificación de los vehículos por parte de todas las marcas.
Un detalle que no pasó desapercibido allí para los más observadores, fue el referido a una serie de anuncios que indicaban el estudio y desarrollo de una posible alianza entre dos gigantes de la industria automotriz: el grupo ítalo americano FCA (Fiat Chrysler Automobiles) y el Grupo francés PSA, que engloba a las marcas Peugeot, Citroën, DS, Opel y Vauxhall.
El año pasado, el Grupo FCA comercializó 4.480.664 vehículos, mientras que las ventas del Grupo PSA alcanzaron las 4.125.683 unidades.
Ambos grupos ya tienen diversos proyectos en conjunto, referidos principalmente a vehículos comerciales, como es el caso de la Fiat Ducato y la Citroën Jumper.
Pero ahora, todo parece indicar que se podría llegar a firmar una alianza entre estos dos gigantes de la industria automotriz global.
Así lo dejaron entrever los responsables de ambos grupos.
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Por el lado de PSA, Carlos Tavares, CEO del Grupo, se mostró interesado en llegar a concretar una alianza con FCA a quien considera que podría llegar a ser un socio muy atractivo.
A su vez, Robert Peugeot, directivo de PSA y miembro de la familia fundadora de la marca del león francés, comentó que si se llegara a presentar otra oportunidad (como fue la adquisición por parte de PSA de las marcas Opel y Vauxhall a General Motors en el año 2017), el grupo francés estaría dispuesto a concretarla.
Por parte del grupo ítalo americano FCA, que tiene entre sus marcas a Fiat, Chrysler, Jeep, Ram, Dodge, Lancia, Alfa Romeo y Maserati, entre otras, también se ha mostrado una buena disposición en cuanto a lograr una alianza.
Así lo expresó Mike Manley, el sucesor de Sergio Marchionne al mando del Grupo FCA, quien comentó que están dispuestos a estudiar nuevas alianzas con la finalidad de potenciar sus marcas. Otro aspecto de suma importancia, es que, al compartir costos de desarrollos y fabricación, se incrementan los beneficios económicos, permitiendo un mayor y más sólido crecimiento.
No es ninguna novedad el interés del Grupo PSA de retornar al mercado estadounidense, allí donde FCA tiene una muy positiva y sólida presencia, principalmente a través de sus marcas Jeep, Dodge y Ram.
Por su parte, Fiat-Chrysler, podría beneficiarse en su participación en el incomparable mercado chino, por intermedio del Grupo PSA, uno de cuyos accionistas es la empresa automotriz china Dongfeng Motor Corporation.