Los datos sobre el ingreso de Ferrari al apetecido segmento de los modelos SUV son cada vez más insistentes y todo apunta a que, al comienzo de la próxima década, un producto de Maranello entrará de lleno a la competencia en la cual varias de las más caracterizadas marcas mundiales como Porsche, Maserati, Lamborghini, Audi, Jaguar y Bentley, ya están pugnando por una buena porción del mercado.
En declaraciones a la prensa norteamericana, el Presidente de Ferrari, Sergio Marchionne, expresó que se está trabajando para aumentar el volumen de producción, tendiente a la ampliación de la cartera de modelos, con lo cual ha dejado entrever la posibilidad de sumar un nuevo segmento. Claro que también podría tratarse del aumento de producción de los modelos actuales, pero todo apunta a la incorporación de nuevos modelos, entre los cuales, una de las prioridades sería la del proyecto F16X, que es el código con el que se conoce actualmente al FUV (Ferrari Utility Vehicule).
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Dentro del plan elaborado por Marchionne, Ferrari deberá duplicar sus beneficios netos en los próximos cuatro años, incrementando su producción, estimándose que para el año 2020 pasaría de las actuales 8.000 unidades anuales a algo más de 12.000 por año.
Todo apunta a que el FUV de Maranello herede la base del Maserati Levante, por lo que sería un cinco puertas de unos cinco metros de largo, contando con un impulsor de ocho cilindros en V que permita disponer de una potencia cercana a los 600 HP.
El primer SUV de Ferrari podría llegar al mercado al comienzo del año 2020 y se estima que la producción anual será de unas 1.500 unidades.
En el muy exigente y sumamente competitivo segmento de los SUVs Premium, tendrá como rivales, entre otros, al Porsche Cayenne, el Audi Q7, el BMW X5, el Maserati Levante, el Bentley Bentayga y el Lamborghini Urus.