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El piloto francés encarará la última etapa con una ventaja de 10,3 segundos sobre Adrien Fourmuax.
Tal como lo comentábamos en nuestro comentario previo a esta primera edición mundialista del Rally de Paraguay, las muy especiales condiciones de adherencia de la típica tierra colorada de Itapúa le han provocado varias sorpresas a los participantes, a lo que ha sumarle la gran cantidad de saltos que han puesto en dura prueba a los sistemas de suspensión de los autos.
A lo largo de las dos etapas que se han desarrollado, ha habido un punto de coincidencia entre ambas: el cambio de líder en la penúltima prueba especial de cada una de las dos jornadas.
Ayer, en la etapa inaugural, Adrien Fourmaux venía concretando un gran trabajo con su Hundai, hasta que cuando faltaban tres kilómetros y medio de la séptima prueba especial, golpeó contra una piedra, provocando la rotura del neumático y también del liderazgo.
El cierre de la primera jornada fue con Kalle Rovanperä (Toyota) liderando las acciones, escoltado, a 7,1 segundos por Fourmaux, que, por su parte, adelantaba a Ott Tänak (Hyundai), por cinco décimas.
Sébastien Ogier (Toyota) estaba cuarto, a 17,8 segundos del líder, seguido, a 3,4 segundos por su compañero del Toyota Gazoo Racing, Elfyn Evans, con Thierry Neuville (Hyundai), en la sexta posición, a 25,7 segundos de Rovanperä.
Y hoy volvió a reiterarse la mala suerte de quien lideraba. Rovanperä encaró muy bien la etapa, a pesar de que no estaba del todo conforme con el rendimiento de su Yaris. Pero el finlandés se las ingenió para mantenerse en la primera posición, hasta el penúltimo tramo del día, en el que se pinchó el neumático delantero derecho de su auto, lo que lo llevó a perder más de dos minutos. Así se le escapó el liderazgo y, además, toda posibilidad de pelear por la victoria mañana, porque quedó a más de dos minutos del líder.
El francés Fourmaux se mantuvo come escolta.
Y fue Ogier el que capturó la posición de líder, favorecido por el infortunio de su compañero de equipo.
El francés había comenzado la etapa en el cuarto puesto de la general, a 17,8 segundos del líder Rovanperä.
Pero con su experiencia y sus notables dotes conductivas, se las fue ingeniando para ascender en la clasificación general y cuando pinchó Rovanperä, allí estaba Ogier para pasar a liderar el rally, terminando la etapa con una ventaja de 10,3 segundos sobre Fourmaux, que siguió conservando la posición de escolta. El tercero, Elfyn Evans, está a 36,6 segundos de Ogier.
Teniendo en cuenta que mañana la etapa final consta de cuatro pruebas especiales sobre 80,02 kilómetros, bien puede decirse que la definición del rally guaraní estará centrada entre Ogier y Fourmaux.
Ott Tänak está cuarto, a 39,1 segundos del primero, con una diferencia, a su vez, de 7,7 segundos con respecto a Neuville. Sexto, ya sin posibilidades de pelear por el triunfo, está Rovanperä.
Además, lógicamente, de la pugna por la victoria, mañana también puede haber un interesante duelo (a la distancia) por el liderazgo del campeonato del mundo, porque de acuerdo a cómo vayan a ordenarse las posiciones finales del rally, Ogier podría llegar a desplazar a Evans de la vanguardia del certamen.
Con respecto al binomio uruguayo integrado por los hermanos Santiago y Matías Ruiz (Peugeot), vienen concretando una gran labor, liderando la categoría Rally4.
Pero, además, en la clasificación general los minuanos se ubican en el puesto 27, superando a varios autos de mayor potencia y de categorías más importantes, quedando hasta el cierre de esta segunda etapa 44 binomios en competencia.
Fotos: wrc.com
