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Completada la primera mitad de la temporada y cuando el certamen mundial de Fórmula Uno se apresta a iniciar su receso por el verano boreal, receso que culminará el 27 de agosto en Zandvoort, con la disputa del Gran Premio de los Países Bajos, Max Verstappen (Red Bull) continúa afianzándose en el liderazgo del campeonato del mundo, con una gestión apabullante, dando muestras de su impresionante talento y de la estupenda performance de su Red Bull.
Este domingo, el neerlandés ganó el Gran Premio de Bélgica disputado en Spa-Francorchamps en forma categórica e inapelable, sumándole, además, la victoria en la carrera Sprint que se desarrolló ayer, convirtiéndose, una vez más, en el absoluto dominador de la actividad, sin dejar lugar a ningún tipo de dudas, tanto con piso seco como en las exigentes condiciones bajo la lluvia, la que se hizo presente reiteradamente en el circuito de las Ardenas.
El viernes Verstappen marcó el mejor tiempo en la clasificación para el gran premio de hoy, pero no pudo largar primero debido a una penalización de cinco posiciones en la grilla por haber cambiado la caja de cambios, mientras que el sábado también se quedó con el mejor registro en la Qualy de la carrera Sprint, competencia que terminó ganando, escoltado por Oscar Piastri (McLaren), con Pierre Gasly (Alpine) en la tercera posición.
Hoy, largando desde el sexto lugar le alcanzaron unas pocas vueltas para apoderarse del liderazgo, controlando luego la situación con solvencia, hasta llegar a la victoria, consiguiendo así su octavo éxito consecutivo y el décimo triunfo de la temporada, que fue, a sus 25 años, el número 45 de su fantástica trayectoria en la Fórmula Uno.
Su coequipier, Sergio Pérez, lo escoltó a 22”306, mientras que Charles Leclerc fue tercero con su Ferrari, seguido por Lewis Hamilton (Mercedes).
Foto: AFP.
