Cuando Fernando Alonso firmó contrato con el equipo Renault para volver a la Fórmula Uno a partir del próximo año, muchos aficionados pensaron que el asturiano iba a ponerse de inmediato a las órdenes de la escudería para preparar debidamente su regreso a la máxima categoría.
Sin embargo, el piloto español se apresuró a aclarar sus planes, expresando: “Este año, mi gran prioridad es la carrera de las 500 Millas de Indianápolis. Va a ser especial por la falta de preparación. Por eso, hasta septiembre no empezaré a trabajar seriamente en el proyecto de la Fórmula Uno para 2021”. Vale recordar que las 500 Millas se realizan habitualmente en el mes de mayo, pero por causa de la pandemia de coronavirus su disputa debió aplazarse para el 23 de agosto, de ahí que el piloto de Oviedo hay hecho oportunamente la aclaración, teniendo en cuenta, además, que los entrenamientos para la mítica carrera de Indy comienzan el 12 de agosto.
Hace pocas horas, en ocasión de la presentación del auto con el que se presentará este año, el Arrow McLaren SP Chevrolet, el asturiano volvió a insistir en que su prioridad, al día de hoy, es la carrera en el mítico óvalo estadounidense.
La prioridad de Alonso por las 500 Millas 2020 se debe a la posibilidad de que, en caso de ganar la carrera, podrá obtener la “Triple Corona”.
La “Triple Corona del Automovilismo Mundial” es un reconocimiento no oficial, pero sumamente apreciado por los pilotos, que se le otorga al ganador de las tres carreras más famosas y emblemáticas del automovilismo deportivo: el Gran Premio de Mónaco de Fórmula Uno, las 24 Horas de Le Mans y las 500 Millas de Indianápolis.
Hasta ahora, el único piloto que la ha obtenido es el británico Graham Hill, que ganó cinco veces el Gran Premio de Mónaco, se adjudicó la victoria en las 500 Millas de 1966 y triunfó en Le Mans en 1972.
Por su parte, Alonso ganó en Mónaco en el año 2006 (justamente con el equipo Renault) y volvió a vencer en 2007, pero con McLaren. El español triunfó en las dos últimas ediciones de las 24 Horas de Le Mans, por lo que le falta triunfar en Indianápolis para cumplir con el desafío que se ha impuesto.
El asturiano ya tuvo dos presencias en Indianápolis. En el año 2017 debutó con el equipo McLaren Honda Andretti Autosport. Llegó a liderar la carrera durante varias vueltas, pero a poco del final tuvo que abandonar cuando iba séptimo. El año pasado ni siquiera pudo clasificar entre los 33 pilotos habilitados para largar la carrera, en un fallido intento con el equipo McLaren Honda.
En esta próxima edición, Alonso intentará nuevamente lograr su objetivo junto a McLaren, utilizando un auto preparado por el equipo Schmidt Peterson, (la misma escudería con la que Santi Urrutia compitió en Indy Lights), equipado con un motor Chevrolet.
