Toyota ha querido adelantar los homenajes que tiene previstos realizar el año que viene por el cincuentenario de su exitosa camioneta Hilux, presentando en el Salón de Frankfurt a un “show car” denominado Hilux ‘Invincible 50’, celebrando de esa manera no sólo los primeros 50 años del modelo, sino también el dominio ejercido a lo largo de estas cinco décadas.
La Hilux ingresó al mercado japonés en 1968 y un año después ya empezaba a ganar usuarios y prestigio a nivel internacional, al comenzar a comercializarse en distintos mercados, principalmente europeos.
A lo largo de estas cinco décadas, se llevan vendidas más de 18 millones de unidades, lo que marca indudablemente el singular éxito y la vigencia de este modelo, que se ha transformado en un ícono dentro de su segmento, estando presente en más de 180 países.
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A su vez, la denominación de “Invencible” no se refiere exclusivamente a los éxitos comerciales o a su histórico liderazgo, sino que también implica un reconocimiento a la calidad, la fortaleza, la fiabilidad, la robustez y el desempeño de la Hilux en todo tipo de terrenos.
El nombre de “Invincible” también se refiere a que esta popular camioneta ha salido indemne de increíbles travesías, tales como conquistar el Polo Norte, trepar a los volcanes islandeses o transitar por la Antártida, entre otras, superando todo tipo de escollos y exigencias.
Y desde el punto de vista deportivo, la Hilux también ha sabido destacarse, principalmente en varias etapas y ediciones del célebre Rally Dakar, el más duro y exigente del mundo.
Desde su ingreso al mercado, la Hilux ha ido acompasando el ritmo de los adelantos de la industria automotriz, adecuándose a las exigencias de los usuarios. Ya no es solamente una camioneta de carga, sino que con el paso de las diferentes versiones, ha ido ganando en tecnología, equipamiento, confort y seguridad, dejando de ser un simple vehículo de transporte de cargas, para transformarse en polivalente, siendo actualmente utilizada como vehículo de trabajo y también de ocio, dotada de los máximos equipamientos y poseedora de un estupendo paquete tecnológico.
Exteriormente esta versión especial se destaca por una robusta defensa frontal inferior de color negro y las molduras del guardabarros también del mismo tono, contando con barras de protección anti vuelco pintadas asimismo de negro mate, al igual que las llantas de 18 pulgadas y seis rayos, que son de exclusivo diseño para esta versión y calzan neumáticos especiales BF Goodrich. La caja está recubierta con una protección plástica y posee una amplia caja de herramientas. También cuenta con una decoración especial que la hace realmente inconfundible.
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El interior también presenta rasgos distintivos, tales como molduras específicas, los paneles de las puertas, las alfombras y la palanca del freno de mano forrada en cuero.
La gran incógnita planteada en torno a esta edición especial radica en saber si solamente se trata de un show car que nunca llegará a fabricarse masivamente, o si, por el contrario, dado el éxito que tuvo en su presentación en el salón alemán, ya está decidida su próxima entrada en la planta de producción, aunque más no sea en una edición limitada a unas pocas unidades.
